Jesús en mi Paz, nos predica el Pastor James Corrales. La Paz os dejo, mi paz os doy, nos dice el Señor, y no la doy como el mundo la da. Una promesa hermosa, del Espíritu Santo, esa paz que sobrepasa todo entendimiento, en que a veces parece que nada funciona, no tengas miedo. Si nos enfocamos en lo que tenemos a nuestro alrededor no será posible tener paz, pero la paz viene de Jesús, aunque no tenga lógica, hechos cercanos por la sangre de Cristo, a base de que confías en él La palabra en hebreo es “Shalom”, relacionada con bienestar, de que el Señor actúe en ti, una paz perfecta. La paz del mundo cambia, es condicional, circunstancial. Si algo no va de acuerdo a ciertas condiciones se declara guerra, hablando de paz y no hay paz. La paz del mundo es débil, basado en interpretaciones, e ignora el problema real. El Espíritu Santo está presente con el castigo recibido en el calvario, y podemos disfrutar de esa paz si confiamos en Él, porque sé lo que tengo, pues Su Espíritu mora en mi. El enemigo está interesado en aquellos que se consagran, el mundo no lo entiende, y por eso llegan pruebas y desafíos, pero si le permites al Espíritu trabajar en ti, él es nuestra paz. Cambia esa paz del mundo por esa paz de Cristo cimentada en la roca. Cristo ya sabía que vendrían pruebas, pero debes confiar en él, pues lo que te creen no tienen tropiezo. Vale la pena estar conectados a Dios.
IPUL Oregon
